El informe completo de los servicios de inteligencia franceses que elogia las Sublevaciones de la Tierra

De acuerdo con las declaraciones del Ministro de Interior francés Gérald Darmanin, la prohibición de los Soulèvements de la Terre estaría justificada por los “acontecimientos inauditos” ocurridos en Sainte-Soline y “la violencia extrema de unos grupúsculos identificados desde hace muchos años por los servicios de inteligencia.”
Sin embargo, un informe de su propio Servicio Central de Inteligencia sobre los Soulèvements de la Terre arroja una luz completamente diferente acerca de estas declaraciones. Al leer este informe confidencial se comprende que, más allá del trillado pretexto de la violencia, el ministro quiere disolver el movimiento, porque está teniendo éxito.
El interés general del informe radica en el hecho que el sociólogo policial encargado con su redactado, explica la historia y las claves de éxito del movimiento con mucho detalle, por más sesgada que sea su óptica.
El documento se publicó el 31 de marzo de 2023 en el semanario digital Lundi Matin (https://lundi.am/Le-rapport-complet-des-renseignements-francais-qui-fait-l-eloge-des)
Soulèvements de la Terre, un vector de radicalismo en las luchas ecologistas
Resumen:
Creados a principios de 2021 por miembros de la extrema izquierda de la ex-ZAD de Notre-Dame-des-Landes, les Soulèvements de la Terre (SLT) han insuflado una nueva dinámica a las luchas ecologistas y han impuesto modos de acción más ofensivos.
- Agregándose a luchas locales, seleccionados por un comité centralizado, los SLT han estado llevando a cabo una veintena de acciones en el marco de un programa centrado en la defensa de las “tierras alimenticias1“, la lucha contra la “hormigonización” y la protección del agua. Las movilizaciones estuvieron divididas en diferentes “Temporadas” y “Actos” (la 4ª temporada comenzó en septiembre de 2022).
- Demostrando la voluntad de agruparse más allá de los ámbitos de protesta de la extrema izquierda, este movimiento ha sabido encarnar la idea de transversalidad de las luchas, reuniendo a asociaciones, sindicatos y movimientos ecologistas en torno a luchas comunes.
- El núcleo duro de SLT, compuesto inicialmente por estrategas de la extrema izquierda, se ha ido ampliando para incluir a activistas de colectivos ecologistas como Extinction Rebellion.
- El movimiento de SLT ha desempeñado un papel fundamental en la difusión y aceptación de modos de actuación más ofensivos. En particular, ha creado el concepto ingenioso de “desarme” que, al situar las acciones de sabotaje dentro de una lógica defensiva de los bienes comunes amenazados, ha convencido a activistas originalmente partidarios de las acciones de desobediencia civil a pasarse a la “resistencia civil”.
- Los SLT también están en el origen de la adopción de un nuevo tipo de acciones colectivas violentas, inspiradas en las de la extrema izquierda: activistas enmascarados, vestidos con trajes blancos o azules, que forman un “bloque blanco” o un “bloque azul”, que suelen enfrentarse a las fuerzas del orden para cometer sus actos de violencia (destrozos, ocupaciones, sabotajes…).
- Los SLT, por su ingenio, su nivel de organización, su poder de influencia, su capacidad de movilización y de cobertura nacional y mediática de las luchas locales asociadas con ellos, representan un actor central de la protesta ecológica radical, transmitiendo a las nuevas generaciones más partidarias de la desobediencia civil, métodos de funcionamiento ofensivos, algunos de ellos desarrollados en la clandestinidad.
1. El funcionamiento de los Soulèvements de la Terre, movimiento agrupador implicado en las luchas ecologistas locales.
Un núcleo duro de militantes de extrema izquierda procedentes de la ex-ZAD de Notre-Dame-des-Landes: la campaña de Soulèvements de la Terre, basada en el rechazo del sistema neoliberal y capitalista (considerado responsable de la crisis social, ecológica y sanitaria), se creó y estructuró en enero de 2021 en torno a un núcleo duro de militantes, todos ellos procedentes de la ex-ZAD de Notre-Dame-des-Landes: Nombre APELLIDOS, Nombre APELLIDOS, Nombre APELLIDOS, Nombre APELLIDOS, Nombre APELLIDOS, Nombre APELLIDOS, Nombre APELLIDOS, dispuestos a exportar a todo el territorio nacional sus experiencias y estrategias desplegadas localmente durante la lucha contra este proyecto aeroportuario.
El manifiesto que detalla los objetivos de este movimiento fue firmado por un centenar de colectivos, asociaciones y personalidades, señalando la voluntad de formar un frente común (extrema izquierda, sindicatos agrarios, colectivos ecologistas, vecinos, etc.) trascendiendo filiaciones de origen y estrategias divergentes (legales, ciudadanas, ocupaciones y acciones más ofensivas) en una lógica de luchas transversales con el fin de agrupar el mayor número posible de activistas y grupos de diferentes procedencias ideológicas.
2. La ampliación a un primer círculo de activistas de colectivos ecologistas
Alrededor de este núcleo duro de activistas de la extrema izquierda, aguerridos y reforzados por su experiencia zadista, este movimiento supo atraer rápidamente a activistas ecologistas curtidos; especialmente desde el final de la primera temporada, tras la acción del Expreso del Gran Peligro2. Las investigaciones de esta oficina han permitido identificar asimismo a muchos activistas tradicionales. La Nombre APELLIDO encarna perfectamente el perfil típico de militantes ecologistas que los SLT han sabido atraer. Siendo activista de Extinction Rebellion (XR), participó en varias acciones de desobediencia civil no violenta de este colectivo en París, antes de unirse a SLT, con el deseo de ir más allá del marco de acciones puntuales llevadas a cabo por XR, que consideraba insuficientes y poco efectivas. Instalada actualmente en la antigua NDDL ZAD, es parte integrante del equipo de dirección del movimiento, promoviéndolo en Francia y en el extranjero. En la estela de Nombre APELLIDO, muchos militantes ecologistas, progresivamente desilusionados por las manifestaciones y las acciones de desobediencia civil, juzgadas “estériles”, se inclinan por radicalizarse y unirse a los SLT. Por ejemplo, Nombre APELLIDO, otra activista del grupo XR París/Ile de France, se distanció progresivamente del grupo ecologista para implicarse plenamente en las acciones más ofensivas y comprometidas propuestas por el movimiento SLT y aparece junto a Nombre APELLIDO durante la acción del Grand Péril Express. El perfil de Nombre APELLIDO también ilustra este tipo de recorrido. Tras su paso por la ex-ZAD de NDDL durante el verano de 2018, fundó el colectivo Désobéissance écoloParis, antes de unirse al grupo Extinction Rebellion la Rochelle; luego asumió el cargo de portavoz nacional del movimiento Youth for Climate (YFC) en Francia. Al principio participó en el movimiento SLT en nombre del colectivo YFC, que firmó la campaña, pero pronto se implicó más personalmente, convirtiéndose en la responsable de comunicación de SLT.
3. Sincretismo militante: un modelo de sinergia entre masificación y radicalismo
Esta gama muy amplia de militantes, atraídos por la retórica y las luchas realizadas por SLT, quedó perfectamente ilustrada durante la manifestación del 29 y 30 de septiembre de 2022 contra el inicio de la construcción de un embalse de sustitución en Sainte-Soline, donde coexistieron tres columnas (blanca, verde, roja), cada una de las cuales aceptó, respetó y se benefició de la diversidad de perfiles y modos de acción presentes. La columna blanca (con un papel protector y pacificador) estaba compuesta principalmente por un público familiar, representantes políticos y periodistas. La columna verde (referencia simbólica a la ecología) estaba formado por activistas decididos, principalmente de los colectivos XR, Greenpeace y Bassines Non Merci. La columna roja (referencia a la simbología antifascista) incluía a los individuos más violentos del movimiento de la extrema izquierda (vestidos de negro según los códigos de los black-blocs) y a activistas de SLT (con trajes azules). Para las estructuras ecologistas, que numéricamente constituyen el contingente más importante de esta alianza informal, esta transversalidad de las luchas se ha impuesto como una necesidad, aunque implica un acercamiento a los grupos más radicales. La necesidad de centrarse en los puntos comunes y los objetivos primó sobre las diferencias. Algunos activistas ecologistas, cansados de las manifestaciones de sensibilización, pudieron satisfacer su búsqueda de acciones más virulentas uniéndose a esta campaña. Además, la práctica de múltiples tácticas por parte del movimiento, inducida por su composición, ofrecía un amplio abanico de modos operativos a activistas y grupos de distintas procedencias ideológicas.
De este manera, SLT ha conseguido atraer en las mismas acciones a un gran número de personas con perfiles y métodos muy diferentes, articulando las prácticas militantes de modo que resultasen complementarias:
– Los miembros de la Confédération Paysanne [CP – Confederación Campesina], entre ellos su portavoz Nombre APELLIDO, han apoyado el movimiento desde su creación, lo que le ha conferido legitimidad y unos conocimientos técnicos, especialmente a la hora de denunciar las “fechorías” del modelo agroindustrial defendido por la Fédération Nationale des Syndicats d’Exploitants Agricoles (FNSEA). La presencia de CP permitió al movimiento deconstruir la “narrativa dominante que quería hacer de esta lucha una batalla entre ecologistas y agricultores”.
– Los antifas, normalmente poco implicados en las luchas contra proyectos considerados “inútiles”, están presentes junto a SLT desde la acción titulada “Bye Bye Bayer, Ciao Monsanto”, del 5 de marzo de 2022. Aportan su saber hacer, especialmente en situaciones de enfrentamiento con la policía.
– Representantes políticos: ha destacado la presencia de algunos cargos electos, llevando sus bandas tricolores, en la manifestación de Sainte-Soline, a pesar de que estaba prohibido, lo que dio legitimidad a la lucha y contribuye a llevarla al debate público.
Por estas razones, la lucha contra las megabalsas podría ser considerada por Nicolas Haeringer, del movimiento climático, como una forma de sincretismo, ya que “se nutre de los gestos e imaginarios que han marcado las batallas de los últimos años”: el lado eruptivo de los Gilets Jaunes, la resistencia de las ZAD, la desobediencia de la Confédération Paysanne, las grandes convergencias del foro social o, también, los convoys de Ende Gelände.
-> El compromiso de SLT con las luchas ecologistas locales
Un comité de SLT organiza regularmente -en la antigua ZAD de NDDL y en el barrio libre de Lentillères de Dijon- encuentros con colectivos locales interesados en adherirse a sus campañas. Los conflictos seleccionados se benefician del apoyo logístico, humano, financiero y organizativo del movimiento. El apoyo de SLT a una lucha local le da generalmente una mayor visibilidad y la acelera. Un buen ejemplo de ello es la cobertura mediática que ha conseguido la lucha contra los embalses de sustitución en las marismas poitevinas desde que los SLT se implicaron en ella, aunque fuese dirigida localmente desde 2017 por el colectivo Bassines Non Merci.
Según un principio de reciprocidad, cada organización y colectivo apoyado por SLT se compromete a apoyar otras luchas en las que SLT está involucrado, amplificando así el número de manifestantes y dando lugar a una gran movilidad de activistas en todo el país. El movimiento cuenta con el apoyo financiero de la asociación Pour la Défense des Terres, creada por Nombre APELLIDO y Nombre APELLIDO (ambos co-presidentes hasta agosto de 2022) y domiciliada en la ex-zona de Notre-Dame-des-Landes.
El flujo de tesorería generado por la asociación permite que el movimiento pueda beneficiarse de importantes ingresos regulares, necesarios para apoyar la lucha, organizar actos festivos y poner en marcha un importante aparato de comunicación. De esta manera SLT llega a recaudar varios miles de euros al mes, procedentes principalmente de donaciones a través de la plataforma HelloAsso. Las asociaciones locales implicadas en las luchas en las que participan SLT se benefician directamente de este apoyo financiero.
-> Una secuenciación temática al ritmo de “temporadas”.
Desde su creación, SLT ha participado en una veintena de acciones, divididas en diferentes “Temporadas” y “Actos”. Las actuaciones se desarrollaron en torno a los ejes de la lucha contra la artificialización de la tierra3 (defensa de las “tierras alimenticias”, “lucha contra la hormigonización”) y de la protección de los bienes comunes, entre ellos el agua, que se ha convertido en un tema importante para los movimientos de protesta.
La 1ª temporada (del 27 de marzo al 17 de julio de 2021), compuesta por 5 actos, dirigidos principalmente contra las industrias consideradas más tóxicas (cemento, pesticidas e industria fitosanitaria) finalizó con la acción Grand Péril Express, que tuvo lugar del 29 de junio al 4 de julio en la región de Île-de-France. La acción estuvo marcada por la ocupación de varias instalaciones de Lafarge y Eqlom por individuos en parte enmascarados y vestidos con monos blancos, que llevaron a cabo actos de sabotaje. Para muchos militantes ecologistas, esta acción supuso un salto en el modus operandi tradicionalmente aceptado.
La temporada 2 (del 22 de septiembre de 2021 al 26 de marzo de 2022), que se centró en el tema del acaparamiento de tierras y su contaminación por el sistema agroindustrial, también se dividió en 5 actos. Esta temporada estuvo marcada por 3 acciones ofensivas vinculadas a la protesta contra los proyectos de embalses de sustitución en las marismas poitevinas (actos 1, 2 y 5). Durante la “Primavera hortelana”, el 26 de marzo de 2022, 300 elementos radicales, vestidos con monos azules, en una marcha de 5.000 manifestantes, atacaron violentamente a las fuerzas del orden. Durante la acción “¡Bye Bye Bayer! ¡Ciao Monsanto!” (acto 4) del 5 de marzo de 2022, destinada a asediar la sede de Bayer Francia, 250 personas, vestidas con monos blancos y enmascaradas, intentaron entrar en las instalaciones de Bayer en Villefranche-sur-Saône.
La 3ª temporada (del 2 de abril al 28 de agosto de 2022) se dividió en 6 actos destinados a mostrar su firmeza al regresar a los lugares de luchas anteriores bajo el lema “No hay alternativa entre el fin del mundo y el fin de su mundo.” El punto culminante de esta edición fue el Gran Charivari del 14 y 15 de mayo de 2022 en la comuna de Pertuis, donde se cometieron varios actos de violencia contra la empresa Pellec (perteneciente al alcalde de Pertuis e implicada en la construcción del polígono industrial en disputa), la policía y las instituciones bancarias.
La 4ª temporada se inauguró con una acción sorpresa el 29 de septiembre, denunciando los proyectos de canteras de arena en Saint-Colomban. Sin embargo, se inició realmente con la manifestación “Ni una balsa más”, contra el proyecto de construcción de un nuevo embalse de sustitución (SEV15) en Sainte-Soline el fin de semana del 29 y 30 de octubre. Muy ofensiva, y beneficiándose de una fuerte cobertura mediática, esta acción reunió a cerca de 5.000 personas, entre ellas 300 activistas radicales decididos, que cometieron actos violentos contra la policía y sabotajes.
II. La difusión de modos operativos ofensivos propios de la extrema izquierda
→ El desarme, o la conceptualización del eco-sabotaje por los SLT.
Los estrategas de SLT consiguieron ingeniosamente, a través del concepto de “desarme”, que la práctica del eco-sabotaje fuera aceptada por un gran número de activistas más partidarios de las acciones de desobediencia civil. Lejos de constituir un consenso general, los daños causados contra las empresas Lafarge y Eqiom en la región de Île-de-France durante la acción del Grand Péril Express por individuos enmascarados, y calificados de “desarme”, habían suscitado numerosos debates internos entre los militantes ecologistas, especialmente del colectivo XR. Los SLT se encargaron de distinguir el concepto de sabotaje, que designa la práctica de “alterar y dañar” sin decir nada sobre “la intención que hay detrás”, del término de desarme, “que significa dejar inoperativas las armas”, subrayando de esta manera “la necesidad de destruir las armas que destruyen el planeta y obstaculizar de esta manera una violencia mucho mayor”.
Al anclar estas acciones en una lógica defensiva, los dirigentes de SLT han conseguido normalizar el uso del sabotaje, y la mayoría de los activistas aceptan ahora, como mínimo, la necesidad de que coexistan diferentes modos de acción. Como prueba de la capacidad de influencia de los SLT, el término “desarme” es utilizado ahora por diversos colectivos, que el justifican por el salto a una nueva etapa, causada por la actitud de los poderes públicos.
-> El recurso a las “acciones directas” clandestinas.
Paralelamente a estas acciones clandestinas de sabotaje, realizadas al margen de las manifestaciones oficiales: del mismo modo que los llamamientos a renovar la “acción directa” lanzados por la extrema izquierda en la primavera de 2020 que dieron lugar a una oleada de acciones contra las redes de comunicación, SLT ha difundido este modus operandi y ha inspirado numerosos actos clandestinos de sabotaje. La lucha contra las “megabalsas” es el ejemplo emblemático de la integración de este nuevo modo de acción en la protesta ecologista. Además de los actos de sabotaje llevados a cabo durante las manifestaciones ofensivas en las marismas poitevinas, los servicios de inteligencia han registrado 18 actos (o intentos) de daños clandestinos en balsas de agua (cortes de revestimientos, daños en tuberías de riego, etc.) desde septiembre de 2021. Ya en octubre de 2021, un vídeo publicado por el sitio web de LundiMatin y retransmitido por SLT instaba a los activistas a continuar las acciones de “desarme” y ofrecía un “tutorial” para “desmantelar salvajemente” este tipo de embalses. Tras las acciones de sabotaje llevadas a cabo en agosto de 2022 contra dos embalses, el fin de semana del 3 y 4 de septiembre se frustró un intento de acción clandestina coordinada contra el SEV 17 en Mauzé-le-Mignon, en la que participaron una treintena de individuos, principalmente de la antigua ZAD de NDDL.
->La apropiación del bloque negro por las luchas ecologistas: creación de “bloques blancos” y “bloques azules”
Inspirándose en los métodos operativos de la extrema izquierda, los SLT adaptaron las características de los “black blocs” a las luchas ecologistas: concentraciones relámpagas, anónimas y descentralizadas de individuos organizados para atacar, a menudo violentamente, los símbolos del Estado y del capitalismo, que pueden desembocar en enfrentamientos con las fuerzas del orden. La acción del Grand Péril Express del 3 de julio de 2021 fue la primera vez que activistas ecologistas enmascarados y vestidos con monos blancos causaron destrozos. Desde entonces, y aunque la acción a cara descubierta era una norma de las acciones ecologistas, la mayoría de los activistas presentes en las acciones de SLT actúan ahora enmascarados y con monos blancos o azules. En la actualidad algunos activistas llevan un pasamontañas, incluso al margen de las propias acciones, para garantizar su anonimato. Por ejemplo, el uso permanente del pasamontañas se observó entre un centenar de activistas presentes en el campamento, desde la víspera de la movilización de Sainte Soline de los días 29 y 30 de octubre. Este modo de acción también se ha extendido entre los militantes de XR, el colectivo Bretagne contra las granjas industriales, el Bloc Lorrain… La aparición de estos “bloques blancos” o “bloques azules” ha dado lugar a comportamientos hostiles o incluso violentos hacia la policía, mientras que militantes decididos, equipados (con máscaras antigás, paraguas, gorros y trajes…) y armados (piedras, morteros, cócteles molotov, bolas de petanca…) ya no tienen reparos en enfrentarse directamente a las fuerzas del orden.
Desde marzo de 2021 ha habido 6 acciones de SLT que han ido acompañadas de ataques violentos contra la policía. Este servicio observa así un aumento progresivo del nivel de violencia. La reciente movilización en Sainte-Soline fue el punto álgido, con un gran número de heridos entre la policía. Aunque la policía ha sido agredida en otras ocasiones (¡Adiós Bayer! ¡Ciao Monsanto!, Grand Charivari), las movilizaciones contra las mega-balsas han provocado los enfrentamientos más violentos. Ya en la manifestación del 22 de septiembre de 2021, en Mauzé-sur-le-Mignon, cuando dos centenares de individuos entraron en las obras de construcción de una reserva de reposición de agua y dañaron las excavadoras, tres gendarmes que intentaron repelerlos resultaron heridos.
El 6 de noviembre de 2021, también en Mauzé-sur-le-Mignon, la policía fue blanco directo de bombas de humo y proyectiles (piedras, escombros y bolas de petanca), hiriendo a dos gendarmes, uno de ellos en la cabeza.
También durante la “Primavera hortelana” del 25 al 27 de marzo en La Rochénard (79) se produjeron nuevos enfrentamientos con la policía, cuando unos 300 individuos decididos lanzaron diversos proyectiles (morteros pirotécnicos, cócteles molotov, piedras) contra la policía. Por último, durante la reciente manifestación de los días 29 y 30 de septiembre de 2022 en Sainte-Soline, 61 gendarmes resultaron heridos durante violentos enfrentamientos con 300 activistas enmascarados (disparo de morteros, lanzamiento de bolas de petanca, cócteles molotov, etc.).
III. Acciones integradas en una estrategia operativa elaborada
El seguimiento, por este servicio de inteligencia, del funcionamiento de SLT y los métodos operativos aplicados por sus dirigentes demuestran una estrategia bien afinada, basada en la experiencia zadista de la lucha librada en su momento en NDDL y dirigida oportunamente a un mayor número de personas, en un contexto favorable a las luchas ecologistas.
->Una fuerte capacidad organizativa: entre el saber hacer y el ingenio.
Las acciones de SLT son elaboradas cuidadosamente y en secreto por unos organizadores que han demostrado, en varias ocasiones, su capacidad de sorprender a dispositivos policiales importantes con sus actuaciones. En la manifestación del 6 de noviembre de 2021, los militantes irrumpieron en una dársena ante la sorpresa de la policía, después de que los manifestantes que se habían dirigido hacia el SEV17, se desviaran hacia el embalse de Cramchaban, al que llegaron a pie, atravesando los canales de agua. En la misma línea, el ultimátum titulado “¡Bye Bye Bayer! Ciao Monsanto!”, que tenía a la sede de Bayer como objetivo de una movilización el 5 de marzo, era en parte un señuelo para la policía. Tal como ya se ha comentado, otra sede de la empresa en la región de Lyon, la fábrica de Villefranche-sur-Saône, había sido objeto por la mañana de un intento de intrusión por parte de 250 activistas enmascarados y vestidos con monos de trabajo. Los SLT despliegan importantes recursos logísticos para garantizar el éxito de sus acciones, sea al margen de las manifestaciones (mediante una meticulosa labor de exploración) o durante las mismas. Para las acciones más elaboradas, se establece un verdadero cuartel general operativo que permite la coordinación táctica, con sesiones informativas (sobre maniobras, cómo comportarse bajo custodia policial, etc.), el uso de walkie-talkies, la distribución de mapas, el apoyo aéreo de un dron que permite dirigir a los activistas en tiempo real en función del posicionamiento de las fuerzas del orden y la presencia de “señalizadores” en las marchas para dirigir los bloques negros. La formación en seguridad digital también corre a cargo de miembros de SLT.
La diversidad de perfiles presentes en las acciones orquestadas por los SLT permite, asimismo, la transmisión de métodos operativos ofensivos y clandestinos a las nuevas generaciones de militantes. En esta lógica, la víspera de la manifestación del 29 de octubre en Sainte-Soline, una cincuentena de militantes se formaron en métodos operativos de “black bloc” en una gran carpa presente en el campamento (simulacros de heridas, utilización de una pancarta reforzada, simulacros de vuelta atrás con enfrentamientos…).
-> Comunicación perfectamente dominada al servicio de la difusión de la ideología de la extrema izquierda .
Los dirigentes de SLT, en tanto que comunicadores hábiles, han integrado perfectamente la importancia de los medios de comunicación para legitimar y democratizar su lucha ante el mayor número de personas y ganar la batalla de la opinión. Siendo reflejo de su objetivo agrupador, estas campañas de comunicación se dirigen tanto a los militantes como al público en general, y se inscriben en una diversidad de tácticas. Beneficiándose de enlaces en los medios de comunicación alternativos próximos al movimiento de extrema izquierda (como LundiMatin) y a la esfera ecologista (por ejemplo, Reporterre), los SLT han conseguido reunir en torno a las mismas acciones a individuos de la extrema izquierda, antifa, zadistas, ecologistas tradicionales y ecologistas más radicales. Para ello, elaboran y difunden vídeos atractivos que recogen tanto los aspectos festivos como los ofensivos de sus acciones -así como parodias humorísticas-, organizan caravanas por todo el país, van directamente al encuentro de los activistas locales e incrementan los contactos e intercambios con toda la clase de contestatarios. Además, desde el principio, el movimiento se ha rodeado de personalidades intelectuales y académicas (como el antropólogo Philippe Descola, el autor e ilustrador de cómics Alessandro Pignocchi, los escritores Alain Damasio y Corinne Morel-Darleux, el historiador-investigador Christophe Bonneuil, etc.) que contribuyen a difundir el mensaje de SLT en los medios de comunicación nacionales.
El 24 de noviembre de 2021 se publicó en la página web del diario Le Monde un artículo contra las “megabalsas”, firmado por 240 personalidades y del que son coautores Julien Le Guet, Nicolas Girod y Lotta Nouqui. La retórica defensiva desarrollada por los SLT al servicio de su causa está perfectamente explotada con fines de comunicación. Los SLT se posicionan como protectores de la naturaleza (“Somos la naturaleza defendiéndose”) y pretenden legitimar el recurso de acciones ofensivas y violentas. Para ello, utilizan conceptos como el desarme, la autodefensa frente a la “violencia institucional” que impone proyectos considerados “ecocidas” o, más recientemente, la noción de “ecorresistencia”, por oposición a ecoterrorismo, que fue utilizada por el Ministro del Interior y Asuntos Marítimos tras la manifestación de Sainte-Soline. De hecho, los SLT consiguieron hacer de la protesta contra las “megabalsas” una verdadera cuestión social, que ahora está en el centro de la actualidad mediática y de protesta, gracias a la importante cobertura mediática de este asunto y a los numerosos debates que siguieron al episodio de Sainte-Soline (los SLT, de hecho, asumen estas acciones radicales, que alimentan las polémicas y garantizan la cobertura mediática).
COMENTARIO:
Los SLT han desempeñado un papel fundamental en el endurecimiento de los métodos operativos y el establecimiento de un “flanco radical” comprometido con las luchas ecologistas, permitiendo así un desplazamiento de la ventana de Overton: las acciones, consideradas demasiado extremas la primera vez, se vuelven, por costumbre, menos violentas a los ojos de los activistas, y las acciones que no obtuvieron el apoyo de una mayoría de la población acaban pareciendo menos radicales. La gran repercusión de este movimiento innovador, considerado recientemente un “modelo de éxito a seguir” en un post de Cerveaux Non Disponibles subtitulado “interés común y diversidad de tácticas”, debería seguir influyendo fuertemente en la radicalización de las luchas ecologistas, que se ha acelerado en los últimos meses. Basándose en este éxito, podrían crearse ramas locales de SLT en todo el país.4
1Es decir: tierras de cultivos de proximidad
2Jornadas de acción contra macroproyectos logísticos en París y su área metropolitana, N.d.T.
3En palabras de Soulèvements: El término “artificialización del suelo” designa un cambio de uso del suelo, es decir, de suelo agrícola a suelo generalmente cimentado para otros fines. Esto es el caso, por ejemplo, del proyecto de construcción de un “ecobarrio” en Les Vaîtes, en Besançon, donde antes se realizaban actividades de horticultura, o de las decenas de hectáreas de vegetación devoradas por la expansión de las canteras de arena en Saint-Colomban y de las excavaciones para instalar las megabalsas. N.d.T.
4Tenía razón el sociólogo policíaco: a mediados de mayo ya hubo más de 120 grupos locales de Soulèvements (N.d.T.)